sábado, 16 de abril de 2016

Tú también puedes escribir VI: Los diálogos

Para este nuevo post, lo primero que tenemos que responder es la siguiente pregunta: ¿para qué sirven los diálogos? Pues bien, los diálogos son una parte importante de la historia, ya que son una de las mayores herramientas a la hora de contar la historia.


La razón de esto es porque nos ayuda a hacer avanzar la historia, principalmente porque nos adelanta la historia directamente. También, porque el personaje puede avanzar, por ejemplo dos personas están hablando y una de ellas le cuenta un hecho y piensa que esta mal, pero la otra le cuenta que puede estar bien según como se mire, por lo cual la primera persona que ha hablado puede ver la situación desde otra perspectiva y puede cambiar. Por otra parte, da ritmo y muestra vida a la historia, ya que hace que la historia pase más rápida y el lector tenga más ganas de leer porque va rápido, a parte de que llenan de vida los personajes. Y, la más importante, aporta información que quizás narrando no podríamos porque quizás tan sólo contamos la historia desde el punto de vista de un personaje.

El siguiente paso a dar, antes de empezar a escribir un diálogo tenemos que saber que tipos existen, por lo cual usaremos el que mejor nos convenga según la historia:

- Guión cinematográficoes un documento de producción en el que se expone el contenido de una obra cinematográfica con los detalles necesarios para su realización. Un guion cinematográfico contiene división por escenas, acciones y diálogos entre personajes, acontecimientos, descripciones del entorno y acotaciones breves para los actores sobre la emoción con que se interpretará. Un guion literario bien escrito tiene que transmitir la información suficiente para que el lector visualice la película en su imaginación: cómo transcurre el diálogo, cómo actúan los personajes y con qué objetos interactúan, sin especificar todavía los pormenores de la producción ni el trabajo de cámara. Para ver mejor la imagen dale clic encima.

- Obra de teatro: tiene cierto parecido con el anterior, y suele llevar el nombre en mayúsculas y luego el diálogo que debe decir ese personaje.

- Forma tradicional española: es parecido al que usan los ingleses en cuanto la puntuación, pero nosotros usamos guiones y ellos comillas. Y, en nuestro caso tenemos bastantes más signos. Es decir es el de guión, explicación de lo que dice el personaje y punto, aunque también se le puede añadir guiones en medio para decir lo que hace o piensa el narrador o la persona.

- Diálogo indirecto: es el que cuenta lo que dicen pero sin guiones. Por lo cual el narrador tan sólo indica lo que se dijo y ya esta.

- Diálogo libre: este no usa comillas, ni guiones, ni cambia de linea cuando termina una interacción. Se introduce en el párrafo de forma natural, en medio de la narración.


Vistos los principales tipos de diálogos, debemos aprender a como usar los diálogos. Para esto os dejo una pequeña pauta, con diferentes características que debemos tener en cuenta para hacerlo:

1. Ve directo al grano

Es decir, evitar poner "dijo María", "le contó Juan", "mintió Alejandro", ya que pueden hacer que el diálogo pierda vida. Aunque no debemos quitarlo del todo, ya que sino no sabremos quién dice el que. Hay que usarlo con conocimiento.


2. Conoce a tu personaje:

Es decir, cada personaje es diferente a otro, por lo cual no será la misma forma de hablar la de María, como la de Alejandro, puede que uno sea más directo, otro sea más tímido, otro use palabras más conocidas, etc. Su forma de hablar puede cambiar según su carácter, su nivel cultural, su profesión o sus aficiones, así que hay que conocer como es y qué hace para saber cual será su forma de expresarse con la boca.


3. Evita los dialectos:

Algunos escritores usan en los diálogos dialectos, los cuales personas de otra zona no pueden entender. A lo que me refiero es que, si tu eres de una zona, lo más posible es que en tu zona un objeto se llame de una forma, y en otro lugar se llame diferente. O que, a la hora de saludar o hablar hablen de una forma u otro. Es decir, no habla igual una persona de Andalucía que una de Asturías, por lo cual debemos usar palabras que puedan entender tanto unos como otros, para que el lector pueda sentirse apreciado.


4. No uses información en diálogos que ya es conocida:

A lo que me refiero es, si el lector ya conoce algo que ha pasado, cuando este vaya a contarlo a un amigo no lo pongas en el diálogo, puede hacer que el lector se aburra de leer algo que ya sabe.


5. No abusar de las etiquetas:

Cuando escribimos el diálogo solemos usar "dijo", cuando alguien dice tal cosa o tal otra, si el lector lee repetidamente esa palabra junto con el nombre del personaje, puede terminar aburriéndose y al final no le hace falta leerlo para saber que pone esto. Por esta razón debemos usar más etiquetas y combinarlas, por ejemplo con: sonrió, mintió, afirmo, exclamó, chillo, etc. Pero siempre siendo conscientes de no pasarnos con ello, ya que sino, como hemos dicho anteriormente, puede que el diálogo pierda vida.



6. Usar frases cortas:

Normalmente la gente cuando habla no se explaya mucho. Por algún lugar de internet, he leído que lo mejor es escribir como máximo doce palabras antes del punto o signo de puntuación.


7. Utilizarlo para controlar el ritmo de la acción:

Es decir, cuando ponemos el diálogo poner al lado, después de un guión lo que hace el personaje. Por ejemplo:

- No me lo puedo creer -dijo María mientras cruzaba los brazos- ¿Cuándo a pasado?
- Esta mañana -indica mientras se pone la bufanda y paga el café- Ha sido todo muy rápido.


8. Usa los vocativos:

Es una forma de ayudarte a ti mismo y al lector, principalmente, para saber quién ha dicho tal cosa. Con los vocativos me refiero a que diga al final de la frase "papá", "mamá", "hermanito", etc.


9. Mostrar emociones:

Para que vuestro personaje parezca real, debéis hacer que tenga emociones: que se enfade, que dude, que discuta, etc. A parte, de que es otra de las formas para hacer más viva la historia.


10. Que sean importantes:

Con esto me refiero que si escribís un diálogo sea porque es necesario, no escribáis uno que no aporte nada a la historia ya que puede hacer aburrir al lector o que pase del diálogo.

Aquí terminan algunas de las formas de cómo usar los diálogos para que sean más divertidos y atrayentes para el lector.


Ejercicio práctico: para poder ejercitar lo que hemos aprendido, una buena manera es creando un diálogo entre dos o más personajes. Podéis empezar con dos personajes y luego con más. El diálogo debe contener lo que se ha explicado anteriormente, así podéis ejercitar loa prendido.

¡Saludos literarios pequeños escritores!